♥ ♥

Llegas a ser partes de mis gestos,ausa de mis sonrisas,
motivo de mis
silencios...no es solo mirarte, tocarte, o besarte,
es que
hablarte, escucharte o pensarte,
motiva el sentido de mis verdades...
Emociones
compartidas,
que iluminan nuestras vidas...
que es verdad, que no
es un cuento,
que te llevo muy adentro
pues no sólo son pasiones,
también
son sentimientos,
Sentimientos encontrados, que gritan extasiados,
que
dos almas gemelas se han enamorado.
motivo de mis
silencios...no es solo mirarte, tocarte, o besarte,
es que
hablarte, escucharte o pensarte,
motiva el sentido de mis verdades...
Emociones
compartidas,
que iluminan nuestras vidas...
que es verdad, que no
es un cuento,
que te llevo muy adentro
pues no sólo son pasiones,
también
son sentimientos,
Sentimientos encontrados, que gritan extasiados,
que
dos almas gemelas se han enamorado.
Una
vez alguien me dijo que lo realmente importante en esta vida son los
pequeños detalles. Un beso rápido, un abrazo, una sonrisa...Y también me
dijeron que el vaso vacío no se llena solo. Y que si estás vacío,
tienes que querer y dejar que te quieran. No hay otra manera de
llenarte. Encerrándote no llegas a ningún lado. Y que sepas que
arriesgarte es ganar. Si no te sumerges dentro del agua, nunca sabrás lo
que se siente al estar completamente rodeado de agua. Y os podéis
quedar con la parte literal del texto, o más bien dicho de estas lineas,
pero yo creo que me quedo con la figurada. Con la parte figurada y todo
lo que va detrás de las palabras, y delante, y al lado
Puedes sentirte
sola y estar en medio de un millón de personas, puedes gritar y que
nadie te oiga, o preguntar y que nadie te conteste. Querer y no tener,
luchar y no conseguir, pelear y no ganar, dar y no recibir. Pero...
¿Sabes qué? Habrá otros momentos en que estés solo pero te sientas
rodeado de mil personas que te quieren. Sin decir nada, alguien sabrá
que las cosas no van bien. Sin preguntar te dirán lo que necesites oir,
conseguirás cosas sin luchar, sobre todo aquellas que no quieras, pero
ganarás batallas sin dejarte la piel en el camino. Recibirás sin tener
que dar nada a cambio. Y después de todo esto, alguien te enseñará que
el único truco que sirve es seguir y sonreir pase lo que pase.
Es lo que hacemos todos: nos lanzamos, y esperamos poder volar. Porque si no es así, caeremos como piedras. Y durante la caída nos preguntamos: ¿se puede saber por qué he saltado? Pero aquí estoy, cayendo. Y sólo hay una persona que puede hacerme creer que vuelo: y eres tú